Vecinitas maduritas viciosas con ganas de sexo lésbico
Este grupo de vecinas quedan cada semana, cuando sus maridos están fuera de casa para realizar una buena cena y pasar un buen rato. Las cuatro se conocen mucho y tienen una relación muy especial. Cuando sus maridos no las dejan satisfechas, ellas aprovechan las cenas para satisfacer sus necesidades sexuales. Después de la cena, empieza lo interesante en el sofá, los besos y las caricias se reparten generosamente, para luego acabar todas desnudas en una orgia de sexo desenfrenado, con buenas masturbaciones y penetraciones con los consoladores.